Cuatro son las iniciativas que Héctor Contreras, ingeniero de mejoramiento en Planta de Hidrometalurgia en Minera Centinela, ha presentado ante el Directorio de Innovación (DINN). Esta cifra lo sitúa como uno de los más activos participantes en la generación de ideas para enfrentar los desafíos del Grupo Minero.
En la última sesión del directorio, efectuada el 22 de octubre, presentó los avances del proyecto “Corte de Inchancables”, aprobado con anterioridad, y que considera una nueva iniciativade detección de elementos que atascan de manera imprevista las máquinas encargadas de triturar los minerales.
Héctor explica que esta idea permite “extraer elementos que generan atollo en el chancador de manera segura, sin intervención humana, erradicando un riesgo”. De esta forma, a través de un brazo robótico, que cuenta con articulaciones y cámaras, un operador puede cortar el inchancable mediante el joystick de una máquina de videojuegos adaptado para ese fin. El proyecto sigue en fase de pilotaje, a la espera de ser probado en condiciones reales, para luego avanzar hacia un prototipo a escala industrial.
Detección previa de inchancables
En el mismo ámbito, el DINN aprobó el nuevo proyecto de Héctor denominado “Ore Inspector” que apunta a detectar, a través de sensores, los inchancables antes del ingreso a las máquinas. De esta manera, se evita paralizar las operaciones para remediar el imprevisto. "Estamos contentos porque después de varios dolores de cabeza y después de un año, logramos dar con buenos resultados", comenta Héctor.
El sistema arrojó resultados positivos en el laboratorio. Asimismo, el Directorio de Innovación solicitó al experto la elaboración de una planificación para el desarrollo del proyecto, la que deberá ser presentada en la próxima sesión.
En tanto, las ideas “Monitoreo integral de correas” y “Uso de drones en espacios confinados” -también presentados por Héctor- fueron traspasados a Excelencia Operacional para que continúen con su desarrollo.
La primera de estas iniciativas busca monitorear las fallas de polines y el desalineamiento en los transportadores de cintas. Esto con la finalidad de reducir detenciones imprevistas, bajar costos y evitar eventuales amagos de incendio.
Por su parte, “Uso de drones en espacios confinados” apunta a detectar tempranamente el desgaste de revestimientos en tolvas, los que al desprenderse generan daños en las cintas transportadoras. El sistema operado a distancia permite llegar a lugares de difícil acceso y considera proteger al dron con una red de fibra de carbono (tipo balón) para evitar golpes por caídas de objetos al interior del equipo.